La situación más grave es la que viven las cuencas del Segura y el Júcar con un un 15,6% y un 26,9% de reservas respectivamente. Pero en cuencas mas "verdes" con la interior del Pais Vasco - con un 33,4% - o la del Duero con un 41,6% de reserva, la situación llama a una urgente reflexión. El año 2017 es el sexto año con menos agua en los embalses en esta época desde 1990, ya en la actualidad se encuentran al 40,25 por ciento, una cifra que ha sido menor en cinco ocasiones desde entonces. Habría que remontarse a 2006 para encontrar un nivel inferior.