La Unión Europea ha prohibido el
uso de tres tipos de pesticidas responsables de la muerte en masa de
polinizadores.
Las abejas son responsables de la
reproducción del 90% de las especies de plantas con flores y de tres cuartas
partes de los cultivos en el mundo. Su desaparición llevaría aparejada cambios
en la biodiversidad, interferencias en el ecosistema y en la alimentación
mundial afectando a frutas, verduras, semillas, frutos secos y aceites e
incluso en la propia subsistencia de otras especies de animales que se
alimentan de ellas.
Según la Coalición para la
Conservación de Polinizadores, de la que España forma parte, el 16,5% de los
polinizadores vertebrados a nivel mundial están en peligro de extinción (lo
cual aumenta hasta un 30% para las especies insulares). En Europa, el 9% de las
especies de abejas y mariposas están amenazadas y las poblaciones están
disminuyendo en un 37% (en el caso de las abejas) y más de un 40% podrían
estar amenazadas.
Por este motivo, la noticia que llega de los 28 países de la UE, con el voto a favor de España, es el primer asalto ganado por parte de las abejas y los grupos ecologistas que desde hace años denunciaban la desaparición paulatina de estos insectos debido al uso de pesticidas en los cultivos. Estas sustancias son muy comunes en la agricultura intensiva y su principal función es proteger los cultivos de las plagas.
Sin embargo, en 2013, tres de estos pesticidas de uso agrícola, conocidos como neonicotinoides, fueron parcialmente restringidos en Europa debido a las conclusiones que arrojó el estudio científico de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) donde se comprobó que eran dañinos para las poblaciones de abejas. Tras el acuerdo alcanzado hoy, la Comunidad Europea prohibirá el uso de estos tres neonicotinoides en espacios abiertos en los que operan las abejas, aunque sí permitirá su aplicación en invernaderos donde las abejas no queden expuestas. La regulación será adoptada en las próximas semanas y entrarás en vigor a finales de año según informó la Comisión Europea.